“Y, en cordial semejanza, buen árbol, quizá pronto te recuerde, cuando brote en mi vida una esperanza que se parezca un poco a tu hoja verde…” Antonio Machado
Nos complace comunicaros que hoy, día 16 de septiembre a la 11 horas, se ha inaugurado el “Bosque de los Doctores/as Honoris Causa” de la Universidad de Cádiz. Dª Soledad Becerril y Dª María Izquierdo, previo a su investidura, como Doctoras Honoris Causa por la Universidad de Cádiz han sido las encargadas de sembrar el primer árbol de este bosque sostenible, al que sucesivamente se les irá sumando los de años venideros.
Con el avance de la Agenda 2030 de Naciones Unidas y la entrada en vigor de la Ley 8/2018, de 8 de octubre, de medidas frente al cambio climático y para la transición hacia un nuevo modelo energético en Andalucía, la Universidad de Cádiz, a través de nuestra Oficina para la Sostenibilidad, ha impulsado campañas ambientales y acciones de sensibilización para la adaptación y mitigación del cambio climático que se desarrollan en el entorno universitario y que dan visibilidad a los compromisos ambientales asumidos desde la Institución con el Desarrollo Sostenible y el Medio Ambiente, el consumo responsable y la minimización del impacto ambiental, todo ello bajo el horizonte marcado por las directrices plasmadas en los Objetivos de Desarrollo Sostenible impulsado por Naciones Unidas.
En este contexto, la creación de este Bosque Honoris Causa dentro del propio campus de Puerto Real que, con la siembra de nuevos árboles por cada nombramiento de este título honorífico que da la universidad, constituirá una herramienta eficaz para la captación de toneladas de CO2eq en la atmósfera compensando de forma simbólica parte de la huella de carbono generada por cada uno de esos doctores honoris causa.
Los árboles presentes en este Bosque Honoris Causa son muy representativos del ecosistema propio del entorno biogeográfico de la zona, donde el pino piñonero y los acebuches presentes ponen en valor espacios pendientes de aprovechamiento que, además de mejorar la calidad ambiental del campus universitario, sirven como receptores de gases de efecto invernaderos, contribuyendo a frenar el Cambio Climático y por ende a la consecución del ODS 13 de Naciones Unidas “Acción por el Clima”.
El valor añadido de este bosque universitario es la transformación de espacios verdes ornamentales que ejercían una función vertebradora del tejido universitario en laboratorios al aire libre donde el alumnado de diferentes disciplinas encuentre un espacio docente en el que realizar actividades acordes con su formación académica y se dote al campus de un recurso más para la educación ambiental.
¡Desde la Oficina para la Sostenibilidad os invitamos a visitar este lugar simbólico que dará mucha vida al Campus de Puerto Real!