El Día Mundial de la Eficiencia Energética se celebra cada año el 5 de marzo, y conmemora la fecha de la primera Conferencia Internacional de la Eficiencia Energética que se celebró en Austria en 1998, en la que se debatió sobre la crisis de la energía, la eficiencia energética y las posibles soluciones y se estableció este día para recordar a la población mundial la importancia de la utilización eficiente de la energía. Es una fecha propicia para reflexionar sobre el uso racional que le damos a la energía, y actuar en consecuencia.
Durante décadas hemos utilizado combustibles fósiles como el carbón, el petróleo o el gas para producir electricidad. Al quemar estos recursos para procesarlos, su alto contenido en carbono ha producido -y aún lo hace- enormes cantidades de gases de efecto invernadero. Estos gases influyen en el cambio climático y en el bienestar de todas las personas, sobre todo de aquellas más desprotegidas (casualmente coinciden con las que menos gases emiten).
Desde la Oficina para la Sostenibilidad durante este mes de marzo, a través del Desafío 3 sobre Eficiencia Energética de la Campaña Ambiental de Cambio de Hábitos para frenar el Cambio Climático ¿Aceptas el Desafío? nos marcamos el objetivo de sensibilizar a la comunidad universitaria y a la sociedad en general de la importancia que representa la energía en nuestras actividades cotidianas (movilidad, iluminación, cocina, entretenimiento…), promover hábitos más sostenibles y eficientes en cuanto al uso energético y a fomentar el uso de fuentes de energía renovables disminuyendo el uso de las energías basadas en combustibles fósiles como el carbón o el petróleo.